Mi colorido Domingo!

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Rosa, rojo, violeta, marrón. Y ese inolvidable amarillo Samario! Un ocaso más en este cielo amargo que cobija mis días y resguarda tus sueños!

Valencia

Víctimas de su idiosincracia, caminan sin gracia por las calles de su triste vida.
Van locos del poder que da la gracia de su tierra bendecida.

Las vacas gordas, las vacas flacas, los ires y venires de sus días.
Cada mañana es un lunes, cada semana es enero.
El tiempo extravío su camino, y se llevó sus sueños.

Retratos de un ayer que ya no existe, viviendo del recuerdo del abuelo.
Ferrocarril que siempre se llevó la vida, y trajo en sigo la muerte.

Tierra de seres del ocaso! Tierra de héroes en potencia, tierra rica de hambre, sedienta de cambio. Tierra sin futuro, sin pasado.

El sol se oculta rojo de vergüenza, la ira se le nota al pasar. Tus cielos ya no vieron otros cielos.
Tus cielos ya no vieron a tus hijos progresar. Conformes de la suerte que se forjan, al día viven siempre nunca más.

Sus hijos adoptados forasteros, de esos que sus pueblos no extrañan. De esos que sus pueblos no reclaman, sanganos de la magia del vicio, el placer, el sexo y el dolor.

Mayúsculas

Y para serte sincera hubiera preferido turbulencia, desde aquí, que es como una esquina, nada cambio. NADA. CON LA MAGNITUD QUE TIENE ESCRIBIR EN MAYÚSCULAS, como gritando! Como suplicando al cielo que algo pase, que alguien me escuche.

Pero no pasa nada, y para serte sincera este desconcierto no ha sido fácil de llevar. Ni siquiera las palabras fluyen, sólo reclamos, y gritos, vivo desesperada, como si todos los días fueran ese sábado, congelados, obra de lo que no paso , de lo que pasó, y de lo que no pasara. Me entiendes?

Las palabras no fluyen, pero la vida tampoco. Y todo se ve gris en esta orilla, gris y he de admitir que el gris y los días lluviosos me gustan. Me gusta la melancolía, es tal vez mi vicio exquisito y macabro. Me no logró lidiar, ni domar, ni comprender todo esto que este tonalidad me produce.

Porque yo quiero movimiento, y nada, nada cambia. Ni siquiera yo, comprendes? Es como que me quede atrapada en esta esquina, en esa mañana. Y todo se ve gris y a la final no veo nada.

Ya no discierno si me duele más la cabeza o el alma. Bueno ya no discierno, ni pienso, ni sonrió, a veces me encuentro sin un sueño. Lo entiendes?

El flautista

No sabes usted señora, que el juzgar a la gente no es sensato? No es que no haya cometido yo tal arrogancia! Si existen días que no me aguanto ni en mis botas! Sabe que es eso? Qué es mirar al espejo y no reconocer nada? Sabe que se siente saltar al vacío por la pasión que tiene.?

Sabe usted, que es ir en contra de lo que sería correcto? Qué es mirar ha ese anciano y sentir que lo quiere y a la vez que ... Recorrer tus recuerdos, recorrer cada instante y sentir que no encuentras señales, y sentir y sentir y llorar?

Imagino que en el libro sagrado esta escrito cada paso que ha dado y dará? Yo creo, en el libre albedrío, es más yo creo que este mundo se puede cambiar. Cada paso por corto que sea, al final le abre paso a los que vienen atrás. Se imagina?

Y por que sí mi elección no la entiende, la ha de poder juzgar? Quien le ha dado el derecho siquiera de poder en las vidas opinar? Porqué mi camino está errado si no sigo su senda al andar? Es acaso este mundo de clones, o borregos u ovejas que se sacan a pastorear? Quiere usted esa venda en los ojos? Oye usted esas notas macabras que llevaron las ratas al mar, recuerda a aquella leyenda. Recuerda su triste final?

Sacrificio es eso que haces para una meta poder alcanzar, siempre hay algo que debas ceder, tiempo, dinero, salud, tranquilidad. Algo que tienes por algo que quieras lograr.

Embriagada de mi

Cada destello de luz es un paso en falso, tu silencio nos consume y nos agota,
Jamás volveremos a ese instante de luna llena, tequila, pulgas y sudor.

A veces creo que no sabes que existo, menosprecias la nada que te ofrezco y estoy cansada de los chismes, las quejas y esta rutina en la que ya no siento que vivamos el día.

Te despides de mi, no te culpo. Nadie soñó este momento. ¿Recuerdas? Ya te llore, ya agotamos eso, lo poco que quedaba. La ventaja, es que nada existió. No hay huellas.

Comencé de la misma manera, embriagada de mi.