lunes, 24 de julio de 2017

Putting all the pieces back together


FractalesDeberíamos estar de acuerdo en que no tenemos que estar de acuerdo. Y vernos más en el otro. Todo en este gran organismo se parece, los procesos en micro y en macro. Como pequeños fractales, producto de una obra maestra y perfecta. 
¿Por qué atacarnos si opinamos diferente?. Si nuestro punto de vista es distinto, no tenemos que convencernos. Solo escucharnos, analizarnos, de golpe, encontramos que algunas de nuestras ideas no son tan desiguales, de pronto se complementan, o se validan. 
¿Por qué esa tendencia a creer que somos dueños de la verdad?, y que nos hace pensar que además existe una sola verdad. Todo es relativo, relativo a la condición en que se desarrollan las cosas, los hechos, los organismos, la vida. 

En cierta medida es un mecanismo de protección, lo desconocido genuinamente nos asusta, y es natural, a la final cuando hemos encontrado ese mejor modo de hacer las cosas, es muy difícil el desarmar el esquema, y si lo piensas pues da pereza volver a comenzar.

Hasta el agua fluye por el camino de menor resistencia, el más fácil y, aun así, su perseverancia la hace la mejor herramienta. Años sobre la misma roca, alteran la roca. 

Pero cuando no hay resistencia, cuando hacemos todo igual, cuando nada nos reta, cuando nada nos obliga a cambiar, perecemos. Porque no crecemos, no evolucionamos, no nos hacemos más fuertes, no somos mejores. 

En cierta forma un poco de contradicción. La ciencia dice que la belleza está en la simetría, dos lados exactamente iguales, pero en contra posición. Podríamos decir que nuestros extremos ideológicos son esos dos lados simétricos, en cierta forma es verdad. Utilizando las mismas herramientas, las mismas mentiras, los mismos esquemas. 


Manipulando con la misma oratoria a las masas, como una receta. Y sin embargo no está del todo mal, son necesarias. Sin el contraste de uno la genialidad del otro no existiría. Si nuestra realidad no pareciera tanto una ficción, no existiría ficción. 

Las pasiones son otro punto importante en esta mesa. La necesidad de creer en algo, y aferrarte a eso. Creer por creer, sin preguntas. ¿Existen respuestas cuando no tenemos preguntas? ¿Existiría la comedia sin la tragedia? ¿Deberíamos todos desarrollar algún grado de conciencia? Está bien o está mal existir solo por existir, ser solo por ser, pasar por la vida sin ningún fin en particular.

A la final eso es la masa, y las masas son necesarias en nuestros esquemas económicos, no todos pueden ser rey, o el filósofo, o el bufón. Realmente se necesita que existan esos pequeños papales de cada uno. Y entonces, ¿por que negar el papel de los que solo existen? ¿Si no existiera el mal existiría el bien?

¿Por que es tan importante conservar al planeta? ¿Para que? ¿La vanidad de que sigue aquí? La vanidad de creernos super poderosos, de querer salvarlo todo, de salvarnos y sacrificarnos. Ahora, por naturaleza si deberíamos hacer más eficientes nuestros procesos, y si eso logra la sintonía del mundo, pues perfecto. Pero ¿y si no? ¿Y si esa perfección igual nos lleva a nada?  

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